La Escuelita de Famaillá, 41 años después
“La Escuelita de Famaillá” es el primer Sitio de Memoria del Noroeste Argentino. Fue inaugurado como tal el 2 de diciembre del año pasado. En la década del 70 el edificio había sido construido para que allí funcionara una escuela; sin embargo, en febrero de 1975, se inauguró como el primer centro clandestino de detención de la Argentina.
El viernes 12, en la esquina de calles Matienzo y Mitre, en la ciudad cabecera del departamento de Famaillá, el ahora Sitio de Memoria recordó la instauración de lo que se dio en llamar el Operativo Independencia. El Operativo Independencia fue el inicio del plan sistemático de exterminio que consistió en secuestros, desaparición de personas, torturas y asesinatos. Fue el comienzo, en plena democracia, de una de las partes más dolorosa de la Historia Argentina. Comprometidos con la construcción de la Memoria, sobrevivientes y familiares de víctimas del terrorismo de Estado, llevaron adelante una actividad donde el arte y la comunicación fueron las herramientas para decirle no al olvido.
La convocatoria era a las 17 horas. En la plaza central un grupo de personas se concentraron para marchar hasta "La Escuelita". En el Sitio de Memoria un espacio para la realización de una radio abierta esperaba a los asistentes. En una de las paredes se expusieron las imágenes tomadas por el ex fotógrafo de la Comisión Nacional sobre la Desaparición de Personas (CONADEP), Enrique Shore. Los lienzos en blanco empezaron a llenarse de colores y con cada pincelada los artistas quisieron dejar su aporte. "El arte no puede seguir esperando que la gente venga a verlo. El arte tiene que salir a la calle y buscar a la gente, ver qué pasa afuera", dijo Gabriel Bazán al ser consultado sobre esta experiencia de pintar ante el público. La lectura de un documento redactado en conjunto por los Organismos de Derechos Humanos, las entrevistas, los registros audiovisuales, la música y algunos juegos para los niños que se acercaron, fueron parte de la jornada que finalizó alrededor de las 21 horas.
Fotografías de Ignacio López Isasmendi.