Justicia a través de los alegatos
El día jueves 3 de agosto los abogados de la Asociación por la Memoria, la Verdad y la Justicia de Santiago de Estero inauguraron la etapa de alegatos en el juicio por el Operativo Independencia. Los doctores Inés Lugones, Rodrigo Scrochi y Pedro Orieta empezaron con un repaso del contexto histórico de las décadas del 60 y del 70, puntualizando los antecedentes en los que se enmarcó la implementación del Operativo Independencia. Profundizando en las características de la región NOA y de Tucumán en particular, valoraron los testimonios de los expertos y la prueba documental. A continuación expusieron los casos de los santiagueños Santos Chaparro, Daniel Cantos, José Loto, Gustavo Holmquist y Rosa Córdoba.
Sobre el final, Inés Lugones realizó un homenaje a la militante Natalia Ariñez, quien declarara en el marco del juicio el año pasado en la causa por el secuestro y desaparición de su padre Jorge de la Cruz Agüero. “Natalia no era una militante más”, sostuvo la abogada y destacó su trabajo en los últimos años por sacar los juicios del recinto. “El Diario del Juicio es un ejemplo de esto”, agregó haciendo referencia al proyecto que Ariñez propulsó desde la agrupación HIJOS y que involucró a estudiantes de la Facultad de Filosofía y Letras. Los aplausos, los abrazos y la emoción concluyeron una extensa jornada que finalizó a las 19 horas del día jueves.
El viernes 4 de agosto una sala de audiencias llena escuchó atentamente la lectura de los alegatos que con gran claridad expositiva presentó el abogado querellante Pablo Gargiulo, luego de una detallada descripción del contexto histórico previo a la implementación del Operativo Independencia haciendo especial hincapié en la situación de nuestra provincia en aquellos años, y del rol de la Iglesia católica y de los medios de comunicación como colaboradores del sistema represivo. Luego se presentaron los pormenores de cada uno de los casos que el doctor Gargiulo representa: por la Secretaría de Derechos Humanos, los de los hermanos Néstor y María Rosa Zurita, Maurice Jeger y Olga Cristina González, y Adán Leiva; y de manera particular, los casos de Juan Martín, Santiago Vicente, Pablo Jaroslavsky, Jorge de la Cruz Agüero y Héctor Hugo Gargiulo y Carmen Gómez, padres del abogado.
Con palabras cargadas de emotividad y fortaleza, Gargiulo terminó su lectura destacando la necesidad de una justicia para los vivos y rescatando, desde su lugar de hijo de desaparecidos, el valor de los compañeros de militancia para hacer frente a las ausencias tan difíciles de llenar. Finalmente, como su colega el día anterior, también recordó a su amiga y compañera de lucha Natalia Ariñez: “Siempre vamos a llevar su sonrisa flameando alta como un estandarte".