Fin de fiesta, así pasó otra Bienal Argentina de Fotografía Documental
Como ya es costumbre, la Bienal Argentina de Fotografía Documental terminó con una fiesta. Esta vez fue en la Sociedad Francesa y fue el corolario perfecto para cerrar cuatro días que, aunque distinta, también fue una fiesta.
Fotos: Italo Lautaro Vaca Navarro
La vigésima segunda edición de un verdadero evento federal -un evento nacional que se hace desde Tucumán desde sus inicios- es una manera de resistir desde el arte que da testimonio. “Esta Bienal es muy particular porque la estamos desarrollando en un contexto muy hostil para cualquier tipo de actividad cultural y la fotografía no escapa a eso”, había dicho el fotodocumentalista Julio ‘Chino’Pantoja.
Contó con actividades que fueron desde revisiones de porfolios, espacios de reflexión, coordinado por figuras reconocidas en el ámbito, como Cora Gammarnik, Cela Volá, Julieta Escardo, Jasmín Tessone, la académica y teórica del performance estadounidense, Diana Taylor y el fotógrafo Juan Travnik. Además, las noches en el patio Lola Mora -en el Ente de Cultura- fue el espacio para el encuentro, el abrazo y el intercambio de bienes y servicios, fomentando la solidaridad y el apoyo mutuo. También se montaron las muestras fotográficas y otras actividades que se extendieron a los espacios públicos, como la plaza Independencia y la peatonal Muñecas.