Cruzando el charco es una banda oriunda de La Plata, Buenos Aires, que cuenta con 12 años de trayectoria. Este sábado 9 se presentará en Tucumán, en el Club Sportivo Floresta, con la apertura de La Ruth. Esta fecha es parte de su gira por el norte del país que incluye además las provincias de Jujuy, Salta y Catamarca. 

Previo a su paso por la provincia, el guitarrista de la banda platense, Nahuel Piscitelli, conversó con La Palta sobre Esencia, el último disco de Cruzando el charco que también intitula la gira nacional. Se trata del sexto álbum de estudio de la banda, pero el primero que editan en vinilo. 

“No es casual que este sea el primer disco que elegimos editar en vinilo, me parece que está a la altura de la situación y de esta vuelta por el norte” dice Nahuel. La convicción de sus palabras le ilumina el rostro cuando cuenta que Esencia es, para ellos, su mejor trabajo hasta ahora. “Todos los discos tienen así como una cuestión de lo visceral, Esencia, para mí, viene no solo a retomar ese concepto, sino a profundizarlo, y desde un lugar de búsqueda interna, volver sobre las cosas que hice mal y quiero remediarlas, de un lugar para darse cuenta de lo que hay adentro”. 

Fusionar, probar y aprender 

De alguna manera, pareciera que este disco sacó de su zona de confort a la banda. En el proceso creativo se propusieron jugar con distintos géneros e invitar a grandes artistas nacionales especializados en ellos. Un ejemplo es la canción “El verano” que compusieron y grabaron en colaboración con el reconocido grupo musical La K’onga. 

“El cuarteto, que no sabíamos muy bien cómo se hacía, nosotros pensábamos que sí, porque es algo que desde chicos escuchamos y que nos gusta cantar y que nos gusta obviamente bailar. Pero cuando los pibes vinieron, nos demostraron que no, dieron vuelta la canción, nosotros la teníamos bastante cerrada, y cuando vinieron Abel con Diego (cantantes principales de La K’onga) fue mortal. Yo nunca jamás en mi vida voy a tocar el cuarteto igual a como lo tocaba”, cuenta, divertido, el guitarrista de Cruzando el charco sobre esta experiencia. 

No es para nada nuevo que la banda haya tomado un desafío como el de componer una canción cuartetera: es característico de ellos amalgamar distintos estilos musicales como el pop, el candombe o el reggae, aunque siempre se mantienen fieles a las influencias del rock. Ante la consulta sobre cuál es la mejor manera de empezar a escuchar a la banda, Nahuel responde seguro: “Si hay dos canciones que tenés que escuchar de Cruzando el Charco, más o menos para conocernos, una es “Terminales” y la otra es “El Trato”, no solo porque son las canciones más populares que tenemos, sino porque realmente parece que son representativasLa primera porque es superrápida, llena de ritmo y un montón de data, y la otra es superlenta, medio vacía, y Cruzando el charco como que ocupa todo ese espectro”.

Montaña rusa emocional 

 Pero el guitarrista no se queda ahí, apuesta un poco más y agrega: “Sumado a eso, por ahí, también otra canción, pero que describe a la banda en general, es “Montaña Rusa Emocional”. Porque Cruzando el charco es una montaña rusa de emociones, no solo por la variación en los estilos musicales, sino también por las temáticas variadas que abordamos desde la letra, y hasta cómo son los shows en general”. 

Esencia logra encapsular en sus 41 minutos todo eso que Nahuel Piscitelli describe, y el show tiene por objetivo llevarlo a la vida, hacerlo real y devolverle al público la experiencia vivida de este disco. 

Esta será la tercera vez que el grupo se presente en la provincia, las expectativas por parte del público tucumano son altas. Nahuel tiene una sonrisa llena de dientes y muelas cuando dice: “lo que tiene particularmente Tucumán, y el norte en general, es que hay como una cuestión medio efusiva. Como llevamos un pedacito de algo que tienen ganas hace rato, entonces, claro, hay una efervescencia, que dicen, estamos acá, y se vive una locura total. Me parece que es por ahí, estamos ahí, es a disfrutar ese momento del presente”. 

Con poco más de una década de trayectoria y seis discos de estudio, Cruzando el charco se ha convertido en una de las bandas más esperadas y reconocidas de la escena nacional, tanto dentro como fuera de las fronteras de Argentina. Este año, la banda se ha consolidado internacionalmente, justamente “cruzando el charco” y llegando a Europa con algunas fechas en España, Francia e Inglaterra. Pero el techo no está puesto ahí, por el contrario, su paso por estos países ha marcado solo el inicio de su expansión. 

Una máquina aceitada

Actualmente, los integrantes de Cruzando el charco están viviendo el mejor momento de la banda, y el lanzamiento de su último disco tiene mucho que ver; sin embargo, no es la única razón por la que se encuentran en lo alto de la montaña rusa. Es algo que Nahuel ha reiterado algunas veces durante la entrevista, lo que viven desde adentro tiene que ver con que son un grupo que está disfrutando mucho de lo que hace, que ya sabe lo que está haciendo. 

“(Esta gira) nos agarra en medio de un proceso muy lindo que es presentar el disco nuevo, es algo que siempre está bueno hacer, salir a girar con canciones nuevas, y lo que creo que es más lindo es poder ver la reacción del público por primera vez ante algo que vos hiciste.  Después que gestaste en el estudio y toda la secuencia, trascender las redes sociales,  porque estar cara a cara, estar en vivo tiene un poco eso, así que para nosotros es un momento muy lindo”. El guitarrista de Cruzando el charco usa las palabras justas, la seguridad de sus respuestas refleja la satisfacción del trabajo realizado, sobre lo que el éxito ha sido nada más que un plus. 

“Con que vayan nosotros ya somos felices. Claramente, hay un contexto socioeconómico que está complejo, entonces simplemente con que vengan al show, ya sabemos que el sacrificio de la gente es enorme y lo valoramos.” dice Nahuel. La invitación está hecha.

La cita es este sábado 9 de noviembre desde las 20 en el Club Floresta (Avenida Colón 471).Podés conseguir tus entradas de forma virtual a través de norteticket.com o de forma física en La Rockeria, Buenos Aires 39, SMT.