La Palta

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Muña Muña: la historia de una mujer que se atreve

foto: gentileza prensa muña muña

Paula Morel Kristof es una cineasta bonaerense. La historia de su vida está atravesada por Tucumán y, esta vez, lleva una historia inspirada en esta provincia e interpretada por actrices y actores tucumanes al otro lado del mundo. Paula está en San Sebastián, País Vasco, España. Viaja con Muña Muña, su ópera prima, y vaya una a saber cuántas ilusiones a cuestas.  La cinta fue seleccionada para participar en la sección Work in Progress (trabajo en progreso) del Festival de Cine de San Sebastián.

Paula estudió en la Universidad de Buenos Aires. Trabajó como productora de cine y televisión y, en 2019, coescribió y codirigió el cortometraje Pequeña, que resultó ganador de festivales nacionales e internacionales. Pero Muña Muña nació de ella, de sus historias y deseos, de sus recuerdos en el valle de Tafí, en la casa de su abuela, donde los veranos se convertían en una aventura interminable.

Muña Muña narra la historia de Olga - interpretada por Liliana Juárez-, una enfermera de 60 años que vive en El Mollar. Esa mujer, que se prepara para que su hijo se vaya a vivir al extranjero, se da la oportunidad de explorar el amor y el deseo con un hombre más joven. La premisa está planteada. Las dudas, la incertidumbre, las contradicciones en las que la protagonista se sumerja serán las que narre esta película que promete conjugar el drama con toques de comedia. “Soy dramática y cómica al mismo tiempo”, dirá Paula mientras habla de su obra, del casting, de las imágenes que le quedaron en el proceso de realización de una pieza que, aunque aún falta terminar, ya le ha dado algunos reconocimientos. 

¿Cómo surgió la idea para Muña Muña? ¿Qué te inspiró a contar esta historia?

Surge de varias formas, desde varios lugares. Por un lado, pensé la historia en ese lugar (El Mollar) porque es donde pasé todas las vacaciones de mi vida. Ahí vivía mi abuela y a partir  de esa primera premisa de querer filmar ahí, más un montón de inspiraciones personales, ajenas y fantasías, se armó esta historia que hoy es Muña Muña.

¿Cuál es el origen y el significado del título en relación con la película?

Muña Muña es el yuyo más conocido y típico de los valles. Es una palabra que escucho desde que soy chica. Vendedores ambulantes que venden Muña Muña. Parte de la historia tenía que ver con ir a recolectar yuyos el Viernes Santo, uno de esos yuyos era la Muña. De ahí viene el título que sintetiza el gran rompecabezas de ideas y cosas sobre el deseo, el amor, la sexualidad, lo místico, los yuyos, las creencias.

¿Cómo fue el proceso de desarrollar el personaje de Olga y qué esperas que los espectadores obtengan de su historia?

foto: cortesía prensa muña muña

El personaje de Olga fue lo que más trabajé y terminó de tomar color, fuerza, voz, imagen y todo en Lili (Liliana Juárez). No sería la misma Olga si Lili no fuera la actriz. Respecto a los espectadores, yo espero que la disfruten. Cada uno tendrá su propia interpretación de la película, pero sí pretendo que sea una película que dé fuerzas. 

¿Por qué la elección de contar la historia combinando drama y comedia? 

Las dos cosas para mí se combinan siempre porque yo soy dramática y cómica al mismo tiempo. Es como mi tono de vida, mi forma de ser. De chiquita que me río y lloro con la misma intensidad. Y también me gusta reírme de las cosas. No conozco otra forma. Fue muy natural narrar desde el drama y la comedia.

¿Cuál fue el mayor desafío que enfrentaste durante la producción de tu primer largometraje y cómo lo superaste?

Hubo muchísimos, pero creo que los desafíos más importantes fueron, por un lado, conseguir el financiamiento, aunque sea para arrancar. Y, por otro lado, no bajar los brazos. O sea, siempre mantenerme alerta y continuar luchando por los objetivos que, en un momento, era hacer la película y que ahora es terminarla. Estar alerta a cada paso, en cada momento. 

Paula Morel Kristof

Después de la experiencia con Muña Muña, ¿qué proyectos tenés en mente para el futuro? ¿Te ves dirigiendo más películas en el mismo género o explorando otros estilos?

Caí en la trampa de que hice una película y me encantó y ahora quiero hacer más. Tengo un próximo proyecto que también es un drama con un poco de comedia. Ya tengo el proyecto escrito y nunca descarto nada de otros estilos, estoy abierta a lo que pueda surgir y a aprender.

¿Cómo ves el futuro del cine argentino en el contexto actual? 

Creo que estamos con un problema tremendo. Si el Gobierno actual no toma medidas el año que viene casi no va a haber películas argentinas. Van a bajar las coproducciones con otros países porque una coproducción es entre países, entre institutos, entonces eso ya está siendo un gran problema. Va a ser muy difícil que surjan nuevos productores porque muchas producciones son posibles gracias al Incaa (Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales). Para las personas que no tenemos recursos económicos, el Estado y las instituciones cumplen una función esencial. Es lamentable, pero bueno, tenemos que luchar para conservar lo conquistado y pelear por lo que falta.

Paula manda estas respuestas desde el avión. Piensa en las imágenes que le quedaron desde que empezó a hacer su primera película. “Me vienen muchas fotos, muchas vivencias con cada una de las personas del equipo técnico, o con Lili”, balbucea. Como quien encuentra una imagen clara en el cajón de fotografías dice: “En el casting cuando conozco a Lili, ella hace una escena y sentí que ahí terminó el casting. No tenía ni que revisar el material, sabía que era Lili la persona”. Los recuerdos le llegan como flashes. Habla de Tulio, el asistente de dirección, luchando contra viento y marea para que todo suceda. Menciona el día que terminaron y con la jefa de producción (que además es su amiga) lloraban en la puerta del hotel. Menciona la mesa de la casa de su abuela, que esta vez compartía con Mariel Bomczuk (productora ejecutiva) y Nicolás Aráoz (integrante de la productora). “Y leímos el guión los tres, en la mesa donde yo solía comer con toda mi familia”, comenta. Ese guión, que es casi una pieza terminada y que ahora la tiene esperando, más que un reconocimiento, la oportunidad de concluirla y mostrarla.