La mirada de los estudiantes
Nuevamente los docentes de algunas facultades de la UNT y escuelas experimentales determinaron un paro por 72 h de todas las actividades académicas, como clases, consultas y exámenes. La medida de fuerza que comenzó el 9 de octubre y finalizó el 11, se dio en las facultades de Agronomía, Artes, Filosofía, Psicología, Bioquímica y Ciencias Naturales. En esta oportunidad los docentes concentrados en el gremio de ADIUNT reclamaron la reapertura de las negociaciones salariales con la Nación y la eliminación del impuesto a las ganancias para los docentes, principalmente debido al crecimiento inflacionario que pasa el país. Según el sector al que representa ADIUNT, el cierre de las negociaciones acordadas en abril se logró por el acuerdo de ciertas universidades que no luchan por la reivindicación docente.
Así fue que la UNT volvió a parar. Entrando en los últimos meses del año, la situación que se viven en las diferentes facultades es crítica. Algunos estudiantes consideran que estas medidas son perjudiciales, mientras que otros reconocen y apoyan el derecho de sus profesores de llevar a cabo una huelga que permita revertir la situación que viven año a año.
“Apoyo los motivos de la huelga, los docentes trabajan para formar un país y no se les paga lo que les corresponde”, afirma Ana Sofía Ferreyra Villanueva, estudiante de la carrera de Arquitectura. Aunque para muchos los reclamos salariales de los docentes son temas propios de ellos, existen grandes columnas de estudiantes que apoyan la moción de quienes transmiten sus conocimientos en clases.
Si bien estas medidas de fuerzas generan grandes distorsiones en el planteamiento anual de cada carrera, y los estudiantes se ven perjudicados ante ello, eso no quita su apoyo. Como lo expresa Yerily Guardia, quien se encuentra finalizando la carrera de Ingeniería Industrial, “apoyo sus reclamos porque entiendo que se trata de mejores condiciones salariales. En lo personal, no me afecta en ninguna de mis actividades universitarias debido a que ya terminé el cursado de las materias, pero los docentes brindan la posibilidad de arreglar la recuperación del tiempo de manera oportuna”.
Si bien esta es solo una de las múltiples visiones que tienen los estudiantes universitarios al respecto, muchos otros reconocen que la medida los perjudica notablemente. “Nosotros pasamos por los cursos explicando el porque del paro e invitando a apoyar el reclamo; sin embargo hay momentos en que el discurso netamente agresivo, reiterativo y cansador de algunos sectores estudiantiles va generando una reacción contraria en el estudiante”, reconoce Florencia Larrea, consejera estudiantil de la Facultad de Filosofía y Letras. Es una realidad que muchas horas de clases se perdieron en este año, y al momento de retornar los exámenes se superponen, las clases resultan más cargadas de contenido en menor tiempo, con el objetivo de cumplir con los tiempos estipulados. De todos modos, muchos docentes reconocen que todo el peso recae sobre el estudiante y optan medidas que permitan generar vínculos solidarios con sus alumnos.
Sin embargo, llegando al final del año, se observa que las medidas tomadas por los docentes universitarios no están siendo lo suficientemente efectivas, pues desde el Rectorado no se dio respuesta al conflicto.
Los docentes universitarios y de las escuelas experimentales, además del paro, decidieron marchar el pasado 10 de octubre, sumándose a la convocatoria a Plaza Independencia realizada por la CTA y otras organizaciones. Fue así que marcharon junto a los alumnos de las diversas carreras que se solidarizaron con su genuino reclamo. “Participo de la mayoría de las marchas, porque reconozco que se trata de algo sumamente importante y que a los alumnos nos toca directamente”, considera Mauricio Barberan, estudiante de Educación Física.
La situación actual de los docentes en la UNT es crítica, el futuro es incierto y la realidad para muchos es decepcionante; pero esto no solo atañe a quienes asisten a las diversas casas de estudio para transmitir conocimientos y generar debates entre los alumnos, sino que afecta a un gran caudal de la población que decide continuar con sus estudios. Se trata del fortalecimiento en la educación gratuita y que día a día pese a al desinterés de muchos, genera mayor participación de los estudiantes.
Delfina Campero
dcampero@colectivolapalta.com.ar
Fuente: http://www.adiunt.org/