Un sueño, una ilusión, una mentira, algo imposible…

Ésas fueron algunas de las frases que comenzaron a repetirse a lo largo de los años, cuando se hablaba acerca de reactivación de los talleres de Tafí Viejo. Estas palabras, que circulan aún por el pueblo taficeño, nacieron gracias a la cantidad de anuncios frustrados que desde el año 2003 realizan los sectores políticos del país.

Actualmente la dichosa reactivación volvió a formar parte de la agenda mediática y política. Días atrás, Cristina Fernández de Kirchner anunció nuevamente, mediante cadena nacional, la renovación de los talleres ferroviarios de Tafí Viejo, que servirán para modernizar y mejorar el estado de los trenes que circulan por todo el país.

Ante esta situación, la esperanza vuelve a surgir entre un pueblo devastado por promesas incumplidas y que sueña algún día ver, como al Ave Fénix, despertar a los talleres entre las cenizas. Algo que quizás esté más cerca de que se puede imaginar, ya que cada vez son más los representantes políticos que se hacen eco de los anuncios, como el ministro del Interior, Florencio Randazzo. Luego de mantener una reunión con el gobernador Alperovich, anunció que ya se giraron $15 millones para la concreción de obras en el sector.

Por su parte, los empleados ferroviarios continúan con su hilo de esperanza, estirado durante años y que espera llegar a su anhelado objetivo: trabajar para volver a poner de pie al gigante taficeño.

Hasta el momento solo anuncios mediáticos se han escuchado. Pero, como se dice, “Del dicho al hecho hay un gran techo”. Al igual que la azúcar en agua, las palabras se diluyen en la inmensidad, sin dejar rastros más que turbio recuerdo, que no se sabe si fue realidad o producto de la imaginación.

Exequiel Reinoso

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