A casi 30 años del atentado a la AMIA: ¿Qué se sabe?
El lunes 18 de julio de 1994 a las 9:53, una bomba estalló en la sede de la Asociación de Mutuales Israelitas Argentinas (AMIA), ubicada en pleno barrio Once de la Ciudad de Buenos Aires. El saldo: 85 personas fallecidas, más de 300 heridos. 29 años de impunidad.
La investigación apuntó desde un inicio a un coche bomba. Así se llega a Carlos Telleldín, un desarmador de autos, y a un grupo de policías bonaerenses que fueron absueltos en 2004 después de un juicio que duró tres años.
Como consecuencia de ese fallo, el presidente Néstor Kirchner formó la Unidad Fiscal AMIA a cargo de Alberto Nisman, quien después del Memorando de Entendimiento con Irán acusó a la presidenta Cristina Fernández. Nisman apareció muerto antes de declarar ante el Congreso. En paralelo, avanzó la causa por el encubrimiento, que comprometió al ex presidente Carlos Menem. Ocho personas fueron condenadas, pero Menem resultó absuelto.
Después de casi tres décadas aún no se pudo establecer de dónde salió el explosivo ni quién le compró a Telleldín la Trafic que se estrelló contra la AMIA. La investigación arroja que el atentado se cometió con ese vehículo.
Aún se desconoce quién fue el conductor suicida. Ese mismo equipo de fiscales, estableció por ADN, que hubo un suicida, pero no el que señaló Nisman en su momento. El fallecido fiscal distorsionó testimonios apuntando a un tal Ibrahim Berro: la prueba científica demostró que esa pista era equivocada, sino fraudulenta.
En informes de inteligencia de Estados Unidos e Israel se señaló a la organización libanesa pro-iraní Hezbollah como responsable del ataque. La pista más firme apunta contra Salman El Reda como quien coordinó todo, aunque no se pudo determinar que haya entrado al país ni con quién actuó.
La acusación principal sigue siendo contra Mohsen Rabbani, ex agregado cultural de Irán en la Argentina.