Desde el colectivo de mujeres Ni Una Menos - Tucumán acompañan a la periodista Geraldine Ibáñez en su denuncia contra Alejandro Villalba, gerente LV12, la tradicional radio tucumana. Según explican desde el movimiento de mujeres, Ibáñez desempeñaba sus tareas de redacción en la página web de la radio de manera remota. Aunque su trabajo en esta modalidad responde a una prescripción médica, Villalba, desconociendo esta situación y su condición de salud, le envió una carta documento para que se presente a trabajar y le quitó el acceso a la web.

La periodista no solo debió hacerse presente en las oficinas de la radio, sino que sufrió desde el destrato de que no se le asigne tarea alguna, hasta el maltrato verbal por parte del gerente. Este, además, le advirtió que no cobraría el sueldo que le corresponde por el trabajo realizado. “Este accionar no es un hecho aislado sino que forma parte de la política patronal de la radio contra los trabajadores, pero principalmente sobre las trabajadoras”, expresan en el comunicado emitido por NI Una Menos - Tucumán.

“Acompañamos a Geraldine y exigimos su inmediata reincorporación y que la patronal se haga cargo de todos los daños ocasionados a su salud e integridad”, advierten desde el colectivo feminista que se prepara para realizar la tradicional marcha del 3 de junio.

A continuación se reproduce el comunicado completo:

¡Basta de violencia laboral contra las trabajadoras de prensa en LV12!

Desde Ni Una Menos Tucumán denunciamos la situación de violencia laboral que viene atravesando la periodista Geraldine Ibañez por parte de los directivos y dueños de LV12.

Geraldine, quien es periodista de LV12 hace más de 17 años, se encontraba realizando trabajo remoto por prescripción médica. Desempeñaba tareas de redacción en la web de la radio. Desconociendo su labor remota y su situación de salud, el gerente Alejandro Villalba le envió una carta documento para que se presente a "trabajar con alta médica", como si no lo hubiese estado haciendo, y le quitó el acceso a la web. Debido a esta notificación, Geraldine se presentó en la radio, pero no le dieron ninguna tarea. El gerente Villalba la llamó a su oficina y comenzó con malos tonos y gritos a difamarla. Le dijo que había agotado todos sus días de licencia y que no le iban a pagar su salario.

Con esta acción no sólo desconocen los derechos laborales y ejercen violencia sino también buscan pasar un despido sin causa para evitar pagar la indemnización. Este accionar no es un hecho aislado sino que forma parte de la política patronal de la radio contra los trabajadores, pero principalmente sobre las trabajadoras.

Los dueños de LV12, multimedio que recibe cifras millonarias de pauta oficial, son parte del gobierno provincial por lo que pretenden valerse de la impunidad para que pase este atropello contra Geraldine y su despido y sirva de amedrentamiento para el resto de periodistas de dicha radio.

Acompañamos a Geraldine y exigimos su inmediata reincorporación y que la patronal se haga cargo de todos los daños ocasionados a su salud e integridad.