La mañana del domingo empezó de la peor manera para casi 50 trabajadores de Clarín: un telegrama de despido. Como si el escenario no fuera suficientemente desolador en esas circunstancias, la sede de calle Tacuarí, donde se encuentra la redacción del diario, amaneció vallada. Todo esto ocurre a cuatro años de los 65 despidos en la misma empresa.

Después de conocerse la noticia de los despidos, en una asamblea abierta de delegados de Sipreba (Sindicato de Prensa de Buenos Aires) y de la comisión interna de Clarín, se resolvió un paro general en todo el gremio. El sindicato exige la reincorporación inmediata de los trabajadores y trabajadoras cesanteados y no permitirá que se despida a ningún otro periodista más.

Desde el Sindicato denuncian, además, la relación entre el conflicto y la personería conseguida por el sindicato. Advierten que resulta evidente ya que los trabajadores organizados en Sipreba tienen la capacidad de negociar y defender los derechos laborales de los periodistas. "Es justo a cuatro años de los 65 despidos del 2019. La redacción amaneció vallada y claramente son despidos injustificados. Son compañeros con un excelente desempeño y trayectoria gremial". dijo el Secretario General del Sindicato de Prensa de Buenos Aires, Agustín Lecchi. 

“En el rubo fotografía nos dejaron sin mujeres fotógrafas”, señaló una de las trabajadoras despedidas. Sobre el final de la jornada del domingo, el Ministerio de Trabajo de la Nación dictó la conciliación obligatoria durante 15 días, resolución que retrotrae las cesantías y obliga a la empresa a garantizar esa instancia. 

Hoy se realiza una reunión en el Ministerio. "Las razones que da la empresa son cuestiones vinculadas a la productividad, a la modificación del negocio, y es totalmente falaz, porque son compañeros con total capacidad para adaptarse en las tareas periodísticas", señaló Lecchi que mantiene el apoyo desde el sindicato a los trabajadores de prensa.