Ley ómnibus: volver a empezar que aún no termina la pesadilla
En medio de una jornada que prometía ser extensa, (se hablaba de un debate que podría extenderse un par de días), el tratamiento del proyecto de Ley de Bases y Puntos de Partida para La Libertad de los Argentinos, públicamente conocida como ‘Ley ómnibus’, volvió a foja cero. Pasadas las 18, y por pedido del partido oficialista La Libertad Avanza (LLA), se suspendió la sesión en la Cámara de Diputados en la que se discutía la aprobación de cada artículo de la polémica propuesta presidencial.
Ya se había aprobado uno de los artículos principales: el tercero que hablaba de la delegación legislativa. En el proyecto original, el presidente Javier Milei, pretendía la declaración de emergencias en materia económica, financiera, fiscal, previsional, seguridad, salud, tarifaria, energética, administrativa, defensa y social. En la primera instancia del debate en el Congreso, la Cámara de Diputados dejó fuera del dictamen las dos últimas. Finalmente, ayer el artículo había sido aprobado solo con seis de las once solicitadas originalmente.
El punto de conflicto fue cuando se trataron la coparticipación del impuesto PAIS y las privatizaciones. Ante esto, se decidió levantar la sesión, volver a comisiones y el oficialismo no dudó en señalar como responsables a los gobernadores. Pero ¿qué significa ‘volver a comisiones’? Esto implica, según lo establece el artículo 155 del Reglamento de la Cámara de Diputados, iniciar el camino de presentación del proyecto de Ley desde cero.
Es así como la aprobación de las facultades delegadas y la aprobación en general dictada el pasado viernes no tienen validez. “Un proyecto que, después de sancionado en general, o en general y parcialmente en particular, vuelve a comisión, al considerarlo nuevamente la Cámara, se le someterá al trámite ordinario como si no hubiese recibido sanción alguna”, señala el reglamento.
El camino recorrido
El 27 de diciembre del año pasado, el ejecutivo nacional envió a la Cámara de Diputados el proyecto, cumpliendo así el primer paso para la sanción de una Ley. El paso siguiente es su ingreso a comisiones para que la debatan y la terminen de redactar. Este debate se extendió desde el 3 hasta el 24 de enero, fecha en la que las comisiones emitieron los dictámenes y los derivaron al pleno de la Cámara. El 2 de febrero, el total de la Cámara aprobó el proyecto en general y el paso que le seguía se estaba dando ayer: que el pleno de la Cámara evalúa artículo por artículo para aprobarlo.
El camino que faltaba
En la Cámara de Diputados, el trabajo ya estaba a punto de concluir. Una vez aprobados los artículos de la nueva legislación, se le otorga media sanción y pasa a la cámara revisora: el Senado. Allí el camino recorrido en la Cámara baja se repite y da su aprobación definitiva para que el Presidente la promulgue.
Ante la falta de garantías de que se aprueben los artículos que más le interesan al oficialismo, el presidente de la Cámara suspendió la sesión y todo lo hecho desde el 27 de diciembre hasta la fecha queda sin efecto. Milei no dudó en hacer público su enojo y apuntó directamente contra quienes no se prestaron a su iniciativa, tratándoles de traidores. “Aquí está la lista de los leales y los traidores que usaron el discurso del cambio para poder rapiñar una banca. Pasen y vean a los enemigos de una mejor Argentina”, escribió en un comunicado que publicó a últimas horas de este martes.