Versión 01.2024

Directrices Editoriales de La Palta


El objetivo de estas Directrices Editoriales es proteger y promover la confianza de nuestros lectores, y cuidar la integridad de La Palta  y su labor periodística, independientemente del formato en que publique.  

Estas Directrices conforman una herramienta práctica para nuestros socios y colaboradores y refuerzan nuestro compromiso con los principios fundamentales del periodismo: exactitud y comunicación basada en hechos; imparcialidad y ecuanimidad; humanidad y respeto por los demás; independencia editorial; y rendición de cuentas por medio de la transparencia.  

Las Directrices plasman nuestras expectativas en cuanto a la conducta de los socios de la Cooperativa de Trabajo de Comunicación La Palta Ltda. (a partir de ahora “la Cooperativa”), nuestros colaboradores, nuestros contratados en modalidad freelance y todos aquellos que aporten contenido editorial. Cubren tres áreas: gestión y práctica general de la sala de redacción, reglas editoriales básicas y conflictos de intereses. 

Las Directrices se aplican a todos los socios cooperativistas o colaboradores de La Palta, en cualquiera de sus formas, y se aplican de acuerdo con la estructura de gestión del medio. Los socios de la cooperativa son los encargados de monitorearla y cualquier abuso, omisión, excepción o cambio sobre estas directrices quedan plasmadas en actas de Asamblea Cooperativa como documento legal firmado por las autoridades de la Cooperativa en función a la fecha: Presidente, Secretario y Tesorero.

Su objetivo es que el público las pueda comprender fácilmente y que se apliquen a todas las actividades de producción, de creación de Contenido y de recopilación de noticias por las cuales el equipo editorial de La Palta sea  responsable.  

Con esto en mente, el medio está elaborando, o ya ha elaborado, directrices de verificación para manejar el Contenido creado por usuarios en línea y demás información recibida por parte del público en general.  

Al aplicar estas Directrices, La Palta consagra su actividad periodística al interés público y al derecho de las personas de acceder a información pública. 

La Palta entiende como interés público, entre otros elementos, los siguientes: 

  • Revelar o debatir temas como la incompetencia, la mala praxis o la conducta poco ética en la vida pública.

  • Corregir información incorrecta cuando una persona o una organización haya engañado al público sobre un tema de importancia pública. 

  • Revelar que una persona o una organización puede no estar cumpliendo con sus obligaciones legales. 

  • La administración adecuada del gobierno en todos los niveles de la sociedad. 

  • La administración abierta, imparcial y eficaz de la justicia. 

  • La seguridad y la salud públicas. 

  • La seguridad nacional. 

  • La prevención y la detección del delito en todas sus formas, denunciando la violencia institucional, sosteniendo los derechos constitucionales y fortaleciendo la democracia, así como el cumplimiento de los derechos humanos. 

  • El desarrollo económico, educativo y social de la sociedad. 

  • El debate, análisis y difusión de obras artísticas o culturales. 

En defensa de estos intereses comunes, La Palta se compromete con lo siguiente: 

A. La independencia editorial y la responsabilidad de delimitar y distinguir claramente toda forma de publicidad, Contenido patrocinado u otros productos editoriales comerciales del material editorial producido en línea con los principios fundamentales del periodismo.  

B. La prohibición de todo Contenido, sea editorial o generado por el público, que incluya difamación,  discursos de odio, invasiones a la privacidad o violencia en cualquiera de sus formas (física, psicológica, de género, étnica, sexual, entre otras). 

Estas Directrices pueden formar parte del contrato de trabajo de un periodista, y también pueden incluirse en procedimientos disciplinarios, promocionales o de reclutamiento de los socios de la cooperativa, las autoridades, de los periodistas o de cualquier colaborador o integrante del medio en cualquiera de sus formas. 

Al respetar nuestras Directrices y los principios fundamentales del periodismo, los periodistas que trabajan para La Palta protegen la independencia, el estatus y la reputación de ellos mismos y de sus colegas.  

Es importante que los colaboradores o profesionales contratados en cualquier modalidad (ya sea de forma interna o tercerizada/freelance) por el medio también respeten estas Directrices cuando trabajen para La Palta.

Nuestra misión 

La Palta Comunicación Popular (a partir de ahora “La Palta” o “el medio”) ejerce un periodismo de calidad y reconoce que la información útil y, sobre todo, fiable desempeña un papel crucial para la sociedad.  

La misión editorial de La Palta es generar un espacio donde los protagonistas de las historias, que quedan al margen de los medios masivos de comunicación, puedan expresarse y relatar sus experiencias en primera persona. La Palta es, entonces, un vehículo para las voces de denuncia, de reclamo y de superación que no llegan a los titulares o desaparecen entre los lugares comunes del periodismo y del discurso oficial. 

Estas historias, ya sea por la gravedad de los hechos que narran o por la importancia social o cultural que conllevan, merecen un desarrollo más extenso y cercano que en el formato noticioso tradicional. Es el aspecto humano —más allá de las 5 W— el que La Palta busca exaltar, acercando nombres, rostros y vivencias al público para generar empatía, conciencia y reflexión. 

Así, La Palta construye un periodismo de interpretación que busca exponer las historias, las voces, las miradas de quienes atraviesan situaciones de injusticia y de abandono; pero también las de quienes resisten, quienes aportan y ofrecen alternativas y salidas colectivas al individualismo que aparece como el discurso excluyente o como única realidad posible en los medios tradicionales. 

En este sentido, La Palta busca aportar al debate público una mirada racional y sólidamente argumentada, pero también una sensibilidad distinta a la que se encuentra en el mundo mediático. Entendemos que las personas que atraviesan situaciones de injusticia son víctimas y no meros objetos que se pueden utilizar para obtener clics. Por eso, al abordar el hecho noticioso lo hacemos con una perspectiva humana y sin fines de lucro. De esta manera, también busca aportar a las causas políticas y sociales en las que sus integrantes creen.

Acerca de los integrantes del medio

Los profesionales del medio, ya sea periodistas, editores, técnicos, colaboradores o cualquier puesto dentro de La Palta adhieren a estas directrices y aceptan que su conducta y ética profesional debe ser acorde a las mismas. Por lo tanto, La Palta puede rescindir de cualquier participación en el medio en caso de denuncias, acusaciones o hechos fehacientemente probados de corrupción, violencia en cualquiera de sus formas (sexual, física, verbal, psicológica, de género, étnica, entre otras), falta a la verdad, manipulación o difusión de datos confidenciales del medio o de las fuentes del medio, abuso de autoridad, sobornos, difamación de material sensible o protegido por la Justicia, falta de resguardo a las fuentes y/o víctimas, por parte de cualquier integrante de La Palta.   

Además, La Palta puede rescindir de cualquier tipo de acuerdo, ya sea por contrato o compromiso voluntariamente asumido, ante el incumplimiento de alguno de los criterios de estas directrices periodísticas o ante la decisión de Asamblea Cooperativa de que el acuerdo cese sin ningún resarcimiento económico u obligación ética entre las partes. 

1. Pautas generales 

  • Los artículos periodísticos encargados por La Palta, y que superan los 2000 caracteres, se publican de forma anónima o con seudónimos solo en circunstancias excepcionales, por ejemplo, si la seguridad, la privacidad o el sustento del autor corren peligro, y solo con el permiso del editor en jefe responsable. En esos casos, los lectores estarán al tanto de que no se revelan las identidades y se les dará una explicación de ello. Esta disposición puede no aplicarse a aquellos autores con seudónimos ya establecidos a quienes La Palta contrate en tal calidad.

    En caso de tratarse de crónicas periodísticas (denominadas internamente como Palta Exprés) de menos de 2000 caracteres, que responden a una coyuntura y que requieren ser precisas, concisas y breves (sin un tratamiento profundo al estilo del medio), pueden salir bajo la firma editorial de La Palta.

  • Por lo general, no efectuamos pagos por noticias o colaboraciones. La Asamblea Cooperativa tiene que aprobar toda rara excepción.

    Al tratar con funcionarios públicos, los periodistas tienen que recordar que la legislación nacional reconoce varios delitos penales que pueden llevarse a juicio. Uno de ellos es el soborno, que puede consistir en ofrecer a alguien una ventaja económica o de otro tipo para que realice una actividad de forma inadecuada, o sobornar o ser sobornado por un funcionario público extranjero.

    En algunas circunstancias, las ofertas o aceptaciones de invitaciones o de pagos como incentivo a funcionarios públicos a fin de garantizar o acelerar la realización de una acción necesaria o de rutina son ilegales.

    Aunque es posible que no pueda ampararse en el interés público, cuando una persona no tenga más alternativa que realizar un pago como incentivo para proteger su seguridad personal, puede alegar coacción.

    Los integrantes siempre deberían conversar con el resto del equipo de antemano o aclarar la política con la Asamblea Cooperativa si tiene dudas respecto de pagos que podrían ser inadecuados y, si se solicitan o se efectúan esos pagos, debería informar de ello a las autoridades de la Cooperativa respecto de las circunstancias lo antes posible.

  • La Palta se adhiere a buenas prácticas de contratación, que incluyen el tratamiento justo de los profesionales contratados en modalidad freelance. Los editores deberían hacer referencia a las buenas prácticas cuando contraten a nuevos colaboradores.

    A su vez, los profesionales contratados bajo esta modalidad tiene la obligación de resguardar la confidencialidad de todo el material o información que le pertenezca a La Palta. Cualquier manipulación, difusión o abuso de los datos o documentos confidenciales del medio serán susceptibles de dar inicio a acciones penales.

  • Las autoridades de la Cooperativa o los responsables y los coordinadores de departamento/área que tengan acceso a datos personales relacionados con otros miembros del medio tienen que tratar esa información como confidencial y no revelarla a nadie, excepto cuando deban hacerlo para cumplir con responsabilidades formales, como ser trámites administrativos o judiciales.

  • Los periodistas no deberían usar Contenido de fuentes no autorizadas de terceros, ya sean imágenes, textos u otro material, sin obtener los permisos necesarios o sin citar el autor o fuente de origen. No obstante, el uso de material protegido por derechos de autor que esté disponible para la publicación de críticas, noticias y opiniones es aceptable y suele estar permitido moral y legalmente.

    Existen unas cuantas situaciones legales en las que puede que no sea necesario obtener permiso, pero los periodistas tienen que consultarlo con el coordinador de fotografía, con los responsables de las imágenes o con el equipo en su conjunto antes de usar material sin permiso.

    Los periodistas deberían familiarizarse en especial con las normas sobre derechos y sobre el uso de Contenido de sitios web públicos.

  • De acuerdo con nuestra política, nos comprometemos a corregir cualquier error significativo lo antes posible. Los periodistas tienen el deber de colaborar de forma sincera y abierta con el editor responsable y con todos los miembros del medio, y de informarles de la existencia de errores. El proceso de presentación y tratamiento de errores debería darse a conocer al público a través de un apartado de “Nota del Editor (N del E)” o “Nota del Autor (N del A)”.

    Cualquier error que afecte directa o indirectamente a otra persona, grupo de personas, colectivo o comunidades puede ser reportado al medio a través del correo contacto@lapalta.com.ar. La Palta se compromete a evaluar el error con el equipo editorial y, en caso de considerar afirmativo el reclamo, salvaguardar el infortunio manera oportuna y transparente, tan pronto como le sea posible.

  • Las leyes sobre difamación y desacato son complejas, y están en constante cambio. Las consecuencias de una demanda judicial pueden ser costosas y dañar nuestra reputación.

    Por eso, los socios y colaboradores de La Palta deberían:

    i) Familiarizarse con las disposiciones legales actuales y buscar más información si tienen dudas sobre algunos de sus aspectos.

    ii) Consultar a los expertos legales sobre dudas concretas sobre una noticia.

    iii) Informarse sobre las condiciones legales nacionales y los casos activos que sean relevantes para su trabajo.

  • Nos comprometemos a respetar la privacidad de las personas. Una buena parte del periodismo puede ser intrusivo per se, pero siempre deberíamos evitar invadir la privacidad de las personas innecesariamente. En ocasiones, cuando existe un claro interés público sobre funcionarios o figuras públicas inmersos en cuestiones judiciales o acusaciones de actos delictivos, violencia en cualquiera de sus formas o vulneración de derechos sobre otras personas o comunidades, los periodistas pueden tener que sacrificar la protección de la privacidad.

    Siempre que entren en juego cuestiones de privacidad, resultan esenciales la proporcionalidad y el análisis previo adecuado. La intromisión tiene que estar justificada por la gravedad de la noticia y por el bien común que puede promoverse a partir de la publicación. Cuando sea posible, debería estar autorizada por una autoridad.

    De la misma manera, los fundamentos de una investigación tienen que ser sólidos; no llevamos a cabo procesos especulativos a menos que el tema, la sospecha y las posibilidades de éxito sean consistentes.

    También se debería proceder con precaución cuando se informen y publiquen detalles identificatorios. Se debe evitar siempre datos como domicilios, documentos de identidad o teléfonos, ya que puedan dar lugar a que otras personas invadan la privacidad o la seguridad de los protagonistas de la cobertura periodística.

  • Nuestra relación más importante es la que tenemos con nuestros lectores y con los usuarios del sitio. Se debe proceder con respeto siempre que se produzca un intercambio en persona, por teléfono, por carta o por correo electrónico.

    El medio e reconoce que la comunicación en línea, por ejemplo, en blogs y redes sociales, puede ser más informal, breve y, en el marco de un debate, confrontativa; sin embargo, los periodistas deberían prestar atención a las directrices sobre blogs y redes sociales.

    Al usar redes sociales, los periodistas que tengan un vínculo conocido con La Palta no deberían hacer declaraciones públicas que puedan poner en riesgo la integridad del medio o cuestionar su propia independencia periodística, ni que contradigan el espíritu de profesionalidad plasmado en estas Directrices. Sin embargo, cada integrante del medio es libre en sus cuentas personales de expresar su opinión ciudadana.

  • Como medio entendemos que, antes que periodistas, somos personas. Y como seres humanos la falibilidad es una característica esencial. Por eso abrimos canales de comunicación a través de nuestro email contacto@lapalta.com.ar y nuestro formulario de contacto en la web y redes sociales para recibir quejas, reclamos, sugerencias, críticas y cualquier tipo de información por parte de nuestras audiencias.

    El medio reconoce que cualquier queja o reclamo será puesto a consideración del equipo editorial y/o la Asamblea Cooperativa con el objetivo de brindar una respuesta justa y/o proceder con una acción correctiva o salvedad, en caso de ser necesario.

    Se asignará como mediador entre el público y el medio a la persona encargada de la Comunicación Institucional. La Palta puede tardar entre 24 y 72 horas en brindar respuesta a la queja, dependiendo de la complejidad del caso.

    Queda expresamente asentado que el medio no se ve obligado a realizar modificaciones en su contenido en caso de que reclamo no se considere justo, o un motivo suficiente para ello, por parte del equipo editorial o la Asamblea Cooperativa. Asimismo, el equipo editorial y/o la Asamblea Cooperativa estarán dispuestas a abrir el diálogo con la persona o grupo de personas que realizan en reclamo para llegar a un consenso, en caso de ser necesario.

    Cualquier tipo de intimidación, amenaza, calumnia, injuria o acto violento hacia nuestro medio o periodistas de La Palta; o cualquier acto que la Asamblea Cooperativa considere de mala fe en los reclamos por parte de las audiencias, será motivo suficiente para abrir un proceso judicial acorde a la gravedad del asunto.

 

2. Reglas editoriales  

  • La confianza en la exactitud, la autenticidad y la fiabilidad de nuestra información es fundamental. Las comunicaciones digitales presentan desafíos especiales, e insistimos en que se corroboren los datos en fuentes fiables.

    Los periodistas deberían informar el nivel de verificación que han podido alcanzar e incluir una aclaración cuando no hayan podido verificar los datos de forma independiente.

    No informamos como un hecho aquella información que no podamos verificar (por ejemplo, “Una estudiante que afirma haber presenciado la manifestación”, no “Una estudiante que ha presenciado la manifestación”).

    Cuando corresponda, estamos dispuestos a explicar a los lectores qué medio se ha utilizado para realizar entrevistas y cómo hemos verificado la información. Procurar que las fuentes sean satisfactorias es responsabilidad de editores, periodistas y corresponsales. Cualquier integrante del medio deberían tener la facultad de cuestionar la fiabilidad de la información y llevarla a discusión en las reuniones generales para definir el tratamiento por consenso.

  • Por lo general, la gente es más honesta si puede mantenerse en el anonimato, y las citas no atribuidas pueden ayudar al lector a comprender mejor un tema. No obstante, el uso indiscriminado de fuentes anónimas puede usarse para promover estrechos intereses políticos, comerciales o de otro tipo de manera subrepticia.

    Pueden existir circunstancias excepcionales en las que puedan usarse citas peyorativas anónimas, pero solo tras haber consultado el editor responsable. En ausencia de una autorización específica, deberíamos parafrasear las citas peyorativas anónimas.

    Nos esforzamos por ser honestos acerca de nuestras fuentes, aunque no podemos mencionarlas.

  • El medio puede conferir la confidencialidad a las fuentes que brinden información de riesgo y cuya integridad (física o psicológica) esté en peligro por brindar su testimonio o información. La Palta se compromete a proteger a las fuentes siempre y ante cualquier situación. No obstante, siempre que sea posible, se debería identificar a las fuentes de información con la mayor especificidad posible.

    Los periodistas, fotoperiodistas y audiovisualistas del medio no deben reproducir material de otras personas, medios o fuentes sin atribuirlo, salvo en circunstancias excepcionales —por ejemplo, cuando se tenga que proteger a la fuente— y, en ese caso, con el permiso de la Cooperativa.

    Siempre se debe dar crédito a la fuente de material publicado que se obtenga de otra organización, incluidas aquellas citas extraídas de otros artículos de prensa o escritos externos como artículos de divulgación científica o citas de libros.

    Las firmas solo deberían incluirse en el material que haya sido elaborado mayormente por el periodista mencionado. Si un artículo contiene una gran cantidad de texto producido por una agencia de noticias, entonces también se debería dar crédito a dicha agencia.

    Si un medio externo, autor, diseñador, fotógrafo, investigador o cualquier persona considera que La Palta está citando su material, debe comunicarse inmediatamente con el medio a través del correo contacto@lapalta.com.ar para proceder con la verificación de dicha acusación y corregir el error. Sin este procedimiento y aviso previo, La Palta se abstiene de atender reclamos por otros medios y podríamos iniciar acciones legales si la gravedad de la acusación nuestro medio.

  • Se debería actuar con especial precaución cuando se trate noticias o relatos que involucren a niños, niñas y adolescentes (menores de 16 años, aunque en el derecho internacional los derechos del niño protegen a personas menores de 18 años).

    No se les deberían formular preguntas que superen sus conocimientos o su capacidad de responder.

    Se debe informar al coordinador responsable cuando se fotografíe o se entreviste a menores sin el consentimiento de un adulto responsable o de uno de sus progenitores. Caso contrario, se deben ocultar los rostros de los menores.

    Se tiene que solicitar su consentimiento para publicar cuando se pueda determinar razonablemente que el menor puede tomar una decisión informada.

    Los periodistas no deberían invadir significativamente la vida privada de los menores sin su consentimiento y comprensión. Si esto sucede, tiene que acompañarse de una sólida justificación relacionada con el bien común.

    Teniendo en cuenta la permanencia del material en línea, los editores deberían considerar la posibilidad de ocultar la identidad de los menores para protegerlos de humillaciones o de daños a medida que crezcan.

  • Los periodistas y los editores nunca deberían modificar las citas directas para alterar su contexto o significado, aunque pueden necesitarse mínimas modificaciones para que resulten más claras.

    Las citas que incluyan falsedades se deberían complementar con texto adicional, en especial cuando se las utilice en titulares o en fragmentos en redes sociales.

  • Los periodistas no deberían aceptar la promoción de intereses económicos de posibles entrevistados o colaboradores, o de sus patrocinadores, mediante artículos, fotografías o notas al pie como forma de asegurarse acceso a estos. Debería incluirse información promocional sobre un tema solo cuando exista un interés o una ayuda genuinos hacia el lector.

  • Buscamos informar de manera inclusiva y justa, dando espacio a personas o grupos que son blanco de críticas o avasallados por grupos económicos o instituciones. Cuanto más graves sean las críticas o las acusaciones de las que informemos, mayor será nuestra obligación de permitir que la parte incriminada responda.

    Este derecho de réplica debería concederse a personas y a grupos, entre ellos, a minorías, cuando se realicen críticas generales.

    Nuestros periodistas y editores respetan a los lectores, y no deberíamos usar despreocupadamente palabras que puedan ofenderlos. Los insultos, por ejemplo, solo deberían usarse cuando sea absolutamente necesario para transmitir los hechos de un artículo o para describir a un personaje y, en esos casos, irán entre comillas. Evitamos usar estas palabras en titulares o resaltarlas.

    La imparcialidad no hace referencia a la “falsa” equivalencia de todos los puntos de vista. Cuando las pruebas científicas o de otro tipo respalden determinada conclusión más allá de toda duda razonable, no se deberían presentar otras opiniones como alternativas viables.

  • Se debería tratar a las personas con sensibilidad al informar en momentos de duelo o traumas.

  • Por lo general, alterar imágenes o distorsionar material audiovisual es inaceptable. Cuando se realicen acciones de este tipo, se debería indicar claramente que las imágenes se han modificado, o que se han alterado o mejorado digitalmente imágenes, montajes e ilustraciones.

    Cuando corresponda, debería solicitarse el permiso para realizar registros en fotografía o video en determinados lugares como salas de audiencias, sitios de memoria, espacios considerados de culto o sagrados, instituto de menores o cárceles, espacios privados, entre otros, a los respectivos propietarios u autoridades responsables. El fotoperiodista deberá presentarse con la credencial del medio bajo las exigencias y resguardo del Estatuto Profesional del Periodista (Ley Nº 12.908).

    La Palta prohíbe bajo estas directrices exponer material violento, sensible, abusivo o vulnerable hacia los derechos de otras personas o comunidades. Cualquier exposición de directo de material considerado sensible puede ser motivo de despido o resarcimiento de cualquier tipo de acuerdo con el medio por parte de los periodistas responsables. En tal caso, la Asamblea Cooperativa evaluará el motivo de tal incumplimiento y considerará si dicho error fue con dolo o con culpa y si el exabrupto llegó a generar un perjuicio en detrimento de terceros en nombre del medio.

    Cualquier reclamo o queja al respecto por parte de terceros o de la audiencia queda sujeta a la Política de Reclamos expresada de estas Directrices Editoriales (Ver “punto 1”, apartado “j”).

  • Nuestras publicaciones se basan en el respeto hacia las culturas, las identidades y los orígenes étnicos o religiosos de las personas o comunidades. La Palta jamás pondrá como foco de sus noticias o artículos cuestiones éticas, a menos que esa información sea pertinente para la noticia. Tal es el caso, por ejemplo, de hechos noticiosos donde el origen étnico o religión forma parte de una descripción identificatoria o resulte importante para denunciar o exponer delito de odio, xenofobia o discriminación.

  • El medio se basa en el respeto hacia los géneros y diversidades. Si bien La Palta cuenta con su manual de estilo y se basa en las reglas idiomáticas establecidas por la RAE (Real Academia Española), nuestro medio prioriza la autopercepción de las personas por sobre las reglas gramaticales establecidas, tal es el caso cuando se hace uso del lenguaje inclusivo (uso de la X, de la e, entre otros).

    Además, La Palta jamás pondrá el foco ni hará mención en sus noticias o artículos a cuestiones que tengan que ver con la sexualidad o identidad de género de las personas, a menos que esa información sea pertinente para la noticia o que la identidad de género forme parte de una descripción necesaria o resulte importante para denunciar o exponer delito de odio, homofobia, transfobia, misoginia o cualquier tipo de discriminación o estigmatización.

  • Los periodistas deberían ser sinceros e identificarse como miembros de La Palta cuando trabajen en una noticia o cuando se contacten con las fuentes. Pueden existir instancias que impliquen noticias de un interés público excepcional donde esto no se aplique, pero, de ser así, se requiere la aprobación del editor responsable. Esto concierne a todo lo que publiquemos, incluidos datos obtenidos por artificios de terceros. (Véase la sección “Privacidad” más atrás).

  • Se solicita a los periodistas que sean precavidos al informar sobre autolesiones, en particular, casos de suicidio o asuntos vinculados a la salud mental de cualquier persona o grupo de personas. En todos los casos es importante no dar a conocer la información de forma tal que se puedan fomentar estas acciones o que pueda verse comprometida la privacidad de terceros involucrados, como familiares cercanos.

    Esto debería tenerse en cuenta al presentar casos de autolesión, incluido el uso de imágenes, tanto así como al describirlos.

    Cuando corresponda, debería facilitarse el número de teléfono de una línea de ayuda e información general sobre la prevención de suicidios y grupos de apoyo.

  • Las transmisiones en vivo resguardarán siempre las identidades de niños, niñas y adolescentes, así como también la identidad de personas o grupo de personas que se encuentren en estado de vulnerabilidad o protegidas por la Justicia a fin de evitar la revictimización.

    Cuando corresponda, debería solicitarse el permiso para transmitir en determinados lugares como salas de audiencias, sitios de memoria, espacios considerados de culto o sagrados, instituto de menores o cárceles, espacios privados, entre otros, a los respectivos propietarios u autoridades responsables. El periodista deberá presentarse con la credencial del medio bajo las exigencias y resguardo del Estatuto Profesional del Periodista (Ley Nº 12.908).

    La Palta prohíbe bajo estas directrices exponer material violento, sensible, abusivo o vulnerable hacia los derechos de otras personas o comunidades. Cualquier exposición de directo de material considerado sensible puede ser motivo de despido o resarcimiento de cualquier tipo de acuerdo con el medio por parte de los periodistas responsables. En tal caso, la Asamblea Cooperativa evaluará el motivo de tal incumplimiento y considerará si dicho error fue con dolo o con culpa y si el exabrupto llegó a generar un perjuicio en detrimento de terceros en nombre del medio.

    Cualquier reclamo o queja al respecto por parte de terceros o de la audiencia queda sujeta a la Política de Reclamos expresada de estas Directrices Editoriales (Ver “punto 1”, apartado “j”).

 

3. Conflictos de intereses 

La Palta valora su reputación como medio independiente e íntegro. Está claro que los periodistas tienen una vida, intereses, pasatiempos, convicciones y creencias fuera del trabajo.  

Instamos a garantizar que los intereses externos no entren en conflicto con nuestra actividad periodística ni comprometan nuestra integridad editorial. 

Las siguientes directrices se refieren a todos los intereses externos existentes que, si no se declararan y salieran a la luz, harían que un lector imparcial cuestionara la independencia de nuestro trabajo editorial.  

No reconocemos la objetividad como una regla, ya que planteamos una línea editorial clara que se basa en el respeto por los Derechos Humanos y con perspectiva de género. Claro está que este posicionamiento va de la mano de la investigación y la rigurosidad de todos los datos o informaciones que se publiquen en el medio de comunicación en cualquiera de sus canales, ya sea sitio web, redes sociales, entre otros. (Véase la sección “Exactitud y verificación” más atrás). 

Además, es obligación de nuestro medio brindar un trato justo y respetuoso a todos las personas, sea cuales fueran sus posicionamientos, perspectivas, dogmas o ideologías. 

En caso de duda, los periodistas deberían consultar a un editor responsable o plantear el asunto en reunión general o Asamblea Cooperativa.

  • La Palta nace y permanece como una organización sin fines de lucro e independiente. Los socios o colaboradores no deberían dejarse influenciar por intereses comerciales —que incluyen los intereses de publicistas— en la preparación de material para nuestro medio.

    Ningún socio ni colaborador de La Palta ni los contratados en modalidad freelance que tengan vínculos conocidos con nosotros deberían usar su puesto para recibir beneficios privados para sí mismos o terceros. No permitimos que se entreguen pagos, obsequios ni otras regalías para socavar la exactitud, la imparcialidad o la independencia de nuestra actividad periodística.

    Todo intento de propiciar un trato editorial favorable a través del ofrecimiento de obsequios o favores deberían ponerse en conocimiento de la Asamblea Cooperativa. Cuando corresponda, se informará de que se han entregado pagos, regalos u otras contrapartidas ventajosas.

    Los miembros del personal no deberían usar su puesto para solicitar beneficios o ventajas en actividades personales o en operaciones financieras o comerciales a los que no pueda acceder el público general.

    El personal no debería usar material de papelería de la empresa en relación con temas externos ni citar una vinculación con la empresa para resolver denuncias como consumidores, obtener un servicio más rápido ni solicitar descuentos u ofertas.

    Comunicaremos cuando una empresa o institución pública o privada hayan afrontado algún costo (de traslado, de alojamiento, entre otros) de un periodista. La aceptación de un ofrecimiento de este tipo dependerá de que los socios de la Cooperativa tengan la libertad de asignar e informar o no de la noticia resultante.

    En el caso de las donaciones de lectores, seguidores, aficionados o audiencias, se informará el uso o destino del dinero recibido de forma desinteresada por ambas partes (compra de equipamiento, pago de viáticos, etc.).

  • Ningún periodista, colaborador o contratado en modalidad freelance que tenga un vínculo principal con nosotros debería patrocinar productos comerciales, a menos que tenga permiso expreso del editor o de la Asamblea Cooperativa. En el caso de participar en la elaboración de notas publicitarias (publirreportajes o Contenido digital patrocinado) se debe dejar en claro al público que se trata de un contenido pago.

  • Los periodistas (socios o colaboradores) tienen derecho a realizar actividades fuera del trabajo (como ocupar cargos públicos o participar activamente en organizaciones, empresas o partidos políticos). Sin embargo, a veces, puede interpretarse que esto influye sobre la integridad de nuestra actividad periodística o entra en conflicto con ella.

    Todos los socios o colaboradores deben informar al equipo y la Asamblea Cooperativa cualquier interés externo, ya sea personal, filosófico o económico, que podría entrar en conflicto con su desempeño profesional o que podría percibirse de tal manera.

  • Los periodistas deberían evitar escribir o dar cobertura sobre temas con el cual tengan un vínculo significativo. En caso de ser necesario, el periodista debe declarar sus intereses cuando escriba o cubra el tema. Esto concierne tanto a periodistas socios de la cooperativa como a colaboradores o contratados en modalidad freelance. La declaración debería presentarse ante el equipo en la reunión general y/o ante la Asamblea Cooperativa. Para proceder con total transparencia puede ser necesario publicar la declaración en el sitio web.

    No es necesario que el vínculo sea formal para que resulte necesario declararlo. Ejercer como asesor en la preparación de un informe para una organización, por ejemplo, exigiría una declaración formal.

    Algunos vínculos son obvios y pueden constituir el motivo por el cual se ha contratado a ese escritor. De ser así, se les debería mencionar al final de la contribución del escritor, aun cuando colabore de forma habitual.

    La Asamblea Cooperativa debería asegurarse de que los contratados en modalidad freelance conozcan las reglas y también están obligados, si procede, a realizar las declaraciones necesarias.

  • La Palta lleva un registro de sus finanzas y está obligada a presentar informes anuales de sus ingresos y egresos ante la autoridad competente, INAES (Instituto Nacional de Asociativismo y Economía Social).

    Todos los socios de la Cooperativa están al tanto del movimiento financiero del medio. Los informes financieros elaborados por el Contador externo y presentados ante el ente regulador, son previamente aprobados en Asamblea Cooperativa.

    La Asamblea debe comunicar, asimismo, cualquier tipo de operaciones en otras tenencias y/o inversiones cuando así lo consideren debido a posibles conflictos de intereses.

    Es sumamente importante que se lleve este registro y que toda la información esté actualizada y sea de fácil acceso para los socios de la Cooperativa.

    Estas Directrices editoriales:

    • Prohíben el uso de información financiera para beneficio de sus periodistas o de personas vinculadas a ellos.

    • Imponen restricciones a los periodistas respecto a informaciones financieras en las cuales ellos mismos o sus familiares cercanos tengan un interés significativo sin comunicar esta situación internamente.

    • Prohíben que los periodistas operen con dinero del medio sin autorización de las autoridades de Cooperativa y la aprobación del Tesorero.

    • Exigen que las autoridades de la Cooperativa y, en especial, el Tesorero procuren declarar los balances de la forma más transparente y exacta posible y que no se den lugar a ningún tipo de opiniones, conjeturas y hechos respecto a las finanzas del medio ni interna ni externamente.

    Esto tiene particular relevancia para la transparencia de nuestro medio y la premisa como organización sin fines de lucro.

  • El medio acepta el derecho de los periodistas a tener una vida privada y a participar en la sociedad civil. Sin embargo, los socios o colaboradores de La Palta también debería informar al equipo en reunión general o ante la Asamblea Cooperativa si, en su capacidad de miembro del medio, tienen intenciones de:

    • Presentar pruebas ante un tribunal.

    • Presidir foros públicos o seminarios organizados por organizadores profesionales de conferencias u organizaciones comerciales.

    • Ocupar puestos laborales externos que tengan probabilidades de entrar en conflicto con sus deberes profesionales.

    • Conducir foros públicos o políticos, o aparecer en plataformas.

    • Presentar quejas o entregar pruebas a un ente oficial en relación con material que haya sido publicado por la empresa.

    Los periodistas invitados a presidir debates o aparecer en paneles como representantes del medio no deberían aceptar pagos ni solicitarlos en tal concepto, a menos que la preparación o la asistencia al evento implique una dedicación significativa de horas personales.

    La Asamblea Cooperativa deberá aprobar la aceptación del pago con anticipación, prestando especial atención a otras disposiciones de estas Directrices, por ejemplo, las referidas a conflictos de intereses, declaración de intereses y promoción de productos comerciales. Puede aceptarse que se cubran gastos de viaje y otros gastos relacionados dentro de lo razonable.

    Por lo general, los periodistas de plantilla no deberían proporcionar asesoramiento sobre relaciones públicas, sobre todo a un público que haya pagado para asistir. Siembre se debe consulte a la Asamblea Cooperativa en caso de duda.

  • La Asamblea Cooperativa, integrada por todos sus socios, representa a la dirección del medio. Todas las decisiones, aprobaciones, rechazos, denegaciones, consideraciones, modificaciones y propuestas quedarán asentadas en actas con las firmas de las autoridades: Presidente, Secretario y Tesorero. Las actas tienen validez de documento legal y son presentadas ante el ente de contralor cooperativo INAES.