Cómo hacer del desecho un hogar

Fotografía cortesía de Bruno Busnelli

La idea surgió después de los saqueos de 2013. Bruno Busnelli y un grupo de amigos conformaron el grupo Renacer Tucumán Solidario. Pero fue el encuentro de Bruno con la historia de Mirian Chaile lo que llevó al grupo a tomar un sentido ecológico. El incendio de la casa de Mirian y la desesperación de una familia que perdió todo hicieron que el grupo solidario se organizara para levantar de las cenizas una casa ecológica. Así lo contaba La Palta cuando el sueño recién empezaba. (1)

Hoy, Bruno y su grupo solidario llevan a cabo talleres de ecoladrillos, hornos ecológicos, huertas familiares y otros trabajos de reciclaje y sustentabilidad ambiental. “Todo lo que sea solidario se está haciendo. Hicimos movidas para un chiquito que tiene cáncer y necesitaba viajar, hasta el Primer Encuentro de Reciclado y Medio Ambiente de Tucumán”, cuenta Bruno Busnelli, quien organizó el evento en la Casa del Bicentenario con ingenieros, huerteros y estudiosos de las ciencias naturales. Facebook fue el primer punto de reunión y la convocatoria fue exitosa.

La técnica de la construcción ecológica llama la atención a todos los que la conocen por primera vez. Así, muchos piensan que las casas realizadas de esta manera no son resistentes o que resulta imposible construir una vivienda con “basura”. Sin embargo, por experiencia del grupo, los jóvenes fueron los que más rápido entendieron el cambio que implicaba una casa ecológica. “Chiquitos de 9 años motivan a los profesores a cambiar las cosas. La hija de una amiga vio en la tele la posibilidad de hacer casas con botellas y la profesora no le creyó. Entonces la chiquita me pidió a mi que dé una charla en la escuela”, cuenta Bruno, destacando la participación de los chicos, quienes no solo se interesaron por el tema sino que donaron ecoladrillos realizados en clase. De esta manera se llegó a la historia de Milagro, una adolescente que por voluntad propia presentó una nota en su colegio solicitando la ayuda de sus compañeros en la realización de ecoladrillos, durante las horas libres, para donar a una familia que había sido víctima de un incendio. Todos se pusieron tanto las pilas que la directora felicitó a los conserjes por la limpieza. Lo gracioso fue cuando le explicaron a la directora que la escuela no se limpiaba desde hace dos semanas y que fueron los propios chicos los que juntaron la basura para hacer ecoladrillos. Son historias como estas con las que se cruzan los integrantes del grupo.

Los talleres de construcción ecológica se dictan los días martes de 9 a 13 horas en Lamadrid 3098. Allí está ubicada la casa de Mirian Chaile, una casa que de los desechos pasó a ser un centro cultural. Poco queda por hacer para que la familia Chaile disfrute de su casa ecológica con calefón solar y asador ecológico. La vivienda está construida por ecoladrillos que se producen con botellas descartables. Las mismas se rellenan con material seco (papel, cartón, plástico) que se compacta para formar el ecoladrillo. La importancia de que sea material seco reside en que la humedad puede causar gases. “Vamos haciendo los cursos por etapas. Ahora hacemos el horno ecológico, luego haremos las mesadas y asadores. Por último la medianera con sistema de ecoladrillos”, explica Busnelli. Las botellas son ignífugas, es decir que resisten al fuego, y el material seco lo convierte en un aislante térmico. El taller está abierto para todas las edades y está organizado de manera que posee solo una pequeña introducción teórica, mientras el resto consiste en actividades prácticas.

Aunque parezca imposible, una casa hecha de material reciclado es tan posible como cualquier vivienda tradicional. “Lo importante es la constancia de estar haciendo algo simple”, dice Bruno dejando en claro que el compromiso es fundamental en este tipo de trabajo, y agrega que eso no significa que quien se suma al desafío tiene que dejar de vivir para ayudar a construir, pero si es necesario saber con quién se cuenta a la hora de planificar una construcción ecológica. Una experiencia que demuestra como tener una vivienda digna, hecha de ecoladrillos, depende de la constancia y de la voluntad de hacerlo posible.

(1) Ecosolidaridad: cuidar el planeta y ayudar a una familia.