Comunicado | Justicia para Celeste

El pasado martes 4 de octubre dio inicio el juicio oral y público en torno a la causa de Celeste, una joven trans tucumana que fue víctima de abuso sexual, además de otras violaciones a sus derechos, por parte de agentes policiales.  

Hacia finales de noviembre de 2013, efectivos policiales ingresaron ilegalmente en el domicilio de la víctima y la llevaron detenida a la seccional IV de San Miguel de Tucumán. Violando lo establecido por la Constitución Nacional y diversos tratados internacionales sobre derechos humanos, Celeste fue apresada a causa de supuestas faltas al código contravencional en la calle. Esto esfalso, puesto que fue secuestrada de su hogar, a la vez que argumentalmente cuestionable, puesto que las detenciones por contravención resultan ilegítimas por entrar en conflicto con la Constitución Nacional y con diversos tratados y acuerdos internacionales.   
Celeste fue privada de su libertad por varios días, en ese período de tiempo se la obligó a dormir en un colchón en el patio y a realizar trabajos de limpieza en la comisaría. A este humillante trato, se le sumó la imposibilidad de contactarse con familiares y de ser asesorada por abogados. Además, fue sometida a violencia física y psicológica por parte del personal policial y a abusos sexuales por parte de un grupo de agentes policiales que estaban de turno en aquel momento, además de otros individuos alojados en la comisaría. Al día siguiente de estos hechos, parte de este grupo obligó a Celeste a cambiar su ropa para ocultar evidencias del delito. 

Estando aún detenida en la seccional, y mientras realizaba tareas de limpieza, Celeste logró escapar, tras lo cual se dirigió al Hospital Centro de Salud donde fue atendida por médicos que constataron en su cuerpo los efectos de la violencia y el abuso sexual. En los días subsiguientes, personal de la comisaría se acercó a su domicilio a fines de sobornarla y amenazarla para que no presente cargos, a lo cual Celeste no accedió.  En consecuencia de estas amenazas, la Sala III dictaminó que Celeste fuera custodiada de manera permanente por la Policía Federal. 

Es necesario subrayar que este no constituye un caso aislado, sino que estamos frente a una situación emblemática y representativa de la vida que se ven obligadas a vivir miles de personas travestis, transexuales y transgéneros, especialmente cuando provienen de sectores vulnerables. Numerosos testimonios dan cuenta de que las personas trans suelen reconocerse en su identidad en la niñez y adolescencia. A partir de este reconocimiento de su identidad autopercibida, muchas veces son echadas de sus hogares y expulsadas encubiertamente de las escuelas a donde concurren. Aparecen entonces, como alternativas casi inevitables de subsistencia, la prostitución y el consumo de sustancias adictivas. En el mismo sentido, el acceso a derechos básicos como la salud, el trabajo, la vivienda -entre otros- es prácticamente inalcanzable para el colectivo trans, a pesar de los avances en materia de legislación y de políticas públicas que se están llevando a cabo en todo el país actualmente. Por todas estas razones, y según arrojan diversos estudios, el promedio de vida de las personas trans en Argentina alcanza no más que los 35 a 40 años, a diferencia del promedio de 80 años del resto de la sociedad.      

A casi tres años de los hechos, comenzaron a desarrollarse las audiencias en el marco del juicio oral y público originado por la denuncia de Celeste, a cargo de la sala III en lo Penal del Poder Judicial de la Provincia y cuyo tribunal está conformado por los doctores Dante Ibáñez (presidente), Néstor Macoritto y Fabián Fradejas (vocales). Por razones vinculadas a su analfabetismo, su situación económica precaria, la falta de acompañamiento por parte del Estado y la ausencia de un verdadero acceso a la justicia, Celeste no se ha constituido como querellante, motivo por el cual la acción está en cabeza únicamente del Ministerio Público Fiscal, representado en esta ocasión por la Fiscal Estela Gifoniello. Los agentes policiales denunciados (Rubén Ernesto Aguirre, Walter Francisco Trejo, Miguel Antonio Concha, Ramón Julio César Ledesma, Roberto Antonio Gallardo y Aldo Omar Quiroga) continúan en funciones y esperaron el juicio en libertad.
  
Las organizaciones que estamos acompañando a Celeste en este proceso hemos solicitado al Presidente de la Corte Suprema de Justicia de la Provincia, Dr. Antonio Gandur, como así también a las oficinas de la Mujer y de Derechos Humanos y Justicia de dicho órgano, se arbitren los medios conducentes para la aplicación de estándares internacionales de género y derechos humanos en el juicio, que eviten analizar pruebas despegándose del contexto que usualmente rodea la vida nuestras compañeras trans. Esto, en orden a evitar caer en re-victimizaciones injustas propias de prejuicios patriarcales, heteronormativos y misotrans todavía arraigados en la sociedad y en el sistema judicial. Consecuentemente, pedimos se tengan en cuenta las 100 Reglas de Brasilia y los principios de Yoguiakarta, entre tantos compromisos internacionales que nuestro país ha asumido para reivindicar una ciudadanía plena para el colectivo LGBTTTIQ. En el mismo sentido, instamos a los medios de comunicación a tratar el caso según los protocolos vigentes y a no exponer imágenes de Celeste, puesto que como víctima de abuso sexual tiene derecho a proteger su identidad.  

Convocamos a organizaciones sociales, políticas y académicas, así como también a militantes y activistas por los derechos de la diversidad sexual, a adherir a este comunicado enviando un email que indique nombres/denominaciones y pertenencia institucional a cetrans.tucuman@gmail.com. Asimismo, invitamos a los mencionados organismos y a la comunidad en general a acompañarnos durante las próximas semanas en el desarrollo de las audiencias. 

Centro Educativo Trans de Puertas Abiertas – Tucumán
Tucumán Diverso
FALGBT (Federación Argentina de Lesbianas, Gays, Bisexuales y Trans) 
ATTTA (Asociación de Travestis, Transexuales y Transgéneros de Argentina) Filial Tucumán
ANDHES (Abogados y Abogadas del NOA en Derechos Humanos y Estudios Sociales)