“Hola Axel Kicillof , ¿viste que acusaron a una mamá y a un papá de haber abusado y matado a su hijta de 21 días? La policía de Sergio Berni publicó sus fotos, y a la mamá la golpearon en una comisaría.

Era mentira.

¿Podés disponer que no repartan más esas fotos de detenidxs?”, reclamó la reconocida abogada Claudia Cesaroni en un posteo en Facebook, dejando clara su postura acerca de la responsabilidad estatal a la hora de exhibir información sobre las y los detenidos que están a disposición de la Justicia.

Lo que determinó la autopsia es que la recién nacida murió a causa de una asfixia mientras era amamantada y de esta manera Layla Melani Rivero y Omar Barrientos, madre y padre de la niña, fueron liberados el sábado 11.

La bebé había ingresado al Hospital Balestrini de La Matanza el martes 7 por la mañana con un paro cardíaco y luego falleció a las pocas horas. Después de su deceso, el personal médico denunció que el cadáver tenía signos de abuso y violencia. De esta manera, la fiscal Silvana Breggia, quien está a cargo de la Fiscalía especializada en Conflictos derivados de la Violencia Familiar y de Género y delitos contra la Integridad Sexual de La Matanza, ordenó la detención de Rivero y Barrientos, y los acusó del delito de homicidio agravado por el vínculo.

El caso generó conmoción en la sociedad no solo por su naturaleza, sino también debido a que recientemente culminó el juicio por el niño Lucio Dupuy, quien fue torturado y asesinado por sus madres. La preocupación por las infancias fue un asunto muy presente durante este último tiempo en los medios de comunicación, pero también la promoción mediática de la violencia hacia las y los detenidos.

Lo particular de este caso es que, tras una autopsia y un tercer informe encargado a la Procuración bonaerense, se demostró que la bebé de 21 días no tenía signos de abuso ni de violencia, contradiciendo el primer informe del Hospital Balestrini.

Por otro lado, los tutores de la bebé fueron brutalmente golpeados durante su detención. “(A mis defendidos) los entregaron y los hicieron moler a palos. La responsabilidad la tienen quienes los custodiaban”, señaló el letrado Miguel Ángel Racanelli en diálogo con Télam. Racanelli informó que pedirá el sobreseimiento más el cierre de la causa y que denunciará penalmente al personal médico que estuvo a cargo del primer diagnóstico y a la directora del Hospital, como así también a la Policía por tortura física y psicológica.

“¿Dónde están los derechos humanos de esas víctimas? ¿Dónde está la protección contra la violencia estatal?”, expresó Cesaroni, y agregó: “hay que cuidar la dignidad de las personas, de todas las que pasan por un proceso penal”.