El 26 de febrero de 2006 Paulina Lebbos fue a bailar a la zona del Abasto. Tras abordar un taxi, desapareció. Días después su cuerpo fue encontrado al costado de la ruta cerca de la localidad de Raco. La investigación del crimen estuvo parada durante años; fiscales, policías y funcionarios del Poder Judicial y Ejecutivo provincial (que serán juzgados en los próximos meses) se encargaron de hacer desaparecer las pruebas que podrían determinar las responsabilidades del hecho.

Su padre, Alberto Lebbos se convirtió a partir de ese momento en el emblema de la lucha contra la impunidad. Al frente de la Comisión de Familiares de Víctimas de la Impunidad marcha cada martes para visibilizar los casos que el poder encubre. Tras 9 años de lucha la justicia comenzó a actuar. Tres policías fueron condenados por falsificar pruebas y 5 funcionarios serán juzgados por encubrimiento.

Fotografías de Ignacio López Isasmendi, Alejandro Cruz y Luciano Billone.