A 36 años de "La noche de los lápices"

Imagen: Marianella Triunfetti | Colectivo La Palta

Imagen: Marianella Triunfetti | Colectivo La Palta

La noche del 16 de septiembre de 1976 comenzó una serie de secuestros de estudiantes secundarios en la ciudad de La Plata, llevados a cabo por militares de la última dictadura argentina en su afán por terminar con la "subversión" en las escuelas. Gran parte de los estudiantes pertenecían a la UES (Unión Estudiantes Secundarios) de la rama del peronismo revolucionario y habían reclamado por un boleto estudiantil que consiguieron en 1975 y fue suspendido al año siguiente. A 36 años de lo sucedido los estudiantes secundarios tucumanos llamaron, una vez más, a la memoria. Bajo la pancarta de "Los lápices siguen combatiendo" convocaron a todos los estudiantes a unirse en pos de luchar por sus derechos. "Creemos indispensable la organización, unión y movilización de los estudiantes que tendrá como objetivo una educación realmente pública, gratuita, laica y de calidad", dijo una estudiante de la Escuela de Bellas Artes.

Los reclamos de los estudiantes son diversos, entre ellos se encuentra la necesidad de mayor presupuesto para las escuelas públicas; la implementación de centros de estudiantes y de la ley de educación sexual; un boleto educativo, gratuito y universal; que se apruebe el voto a los 16 años y, con ello, que se generen en todas las escuelas espacios curriculares que les brinde herramientas que les permita entender el funcionamiento político.

Los estudiantes, al igual que hace 36 años, se encuentran en pie de lucha por la educación que consideran herramienta fundamental para la libertad de los pueblos. A pesar del festejo que se llevaba a cabo en el mismo momento en la Plaza Independencia donde la música y el gentío irrumpían, no dejaron de levantar sus voces reclamando lo que les parece justo para ellos y todos sus compañeros. Educación de calidad, condiciones edilicias dignas, autonomía de los centros de estudiantes fueron los pedidos recurrentes.

"Los compañeros de La Plata no fueron derrotados, viven en nuestra lucha y en cada lucha" se escuchó decir a uno de los oradores.  A continuación un aplauso caluroso cerró el discurso que se disipaba en una estela de unión y organización de los jóvenes que sueñan con una provincia donde la educación sea mejor y sirva a la consolidación de la democracia.

Marianella Triunfetti

mtriunfetti@colectivolapalta.com.ar