Lo que se esconde bajo la alfombra de un gigante
/Los trabajadores de prensa atraviesan una difícil situación. Salarios escasos, precarización laboral, ausencia de puestos de empleo y malas condiciones de trabajo, son algunas de las batallas que deben enfrentar los comunicadores, periodistas y trabajadores de los medios, a pesar de la existencia de un estatuto y una ley que los ampara.
Siguen estando en la "clandestinidad" muchos medios que trabajan a pulmón desde lo alternativo. Siguen siendo explotados cientos de periodistas que superan las veinte horas extras mensuales que limita el artículo 34 del Estatuto del Periodista Profesional. Siguen existiendo pasantes en negro que forman parte de la redacción principal de muchos medios gráficos del país. Como si eso fuera poco, siguen en riesgo la vida de muchos trabajadores que no cuentan con los requisitos y controles necesarios de salubridad en sus áreas de trabajo.
Tal es el caso de los trabajadores de la planta Artes Gráficas Rioplatenses- Grupo Clarín, quienes denuncian la falta de medidas de seguridad por parte del multimedio. Esta es la principal planta impresora del país. Las condiciones en la que se encuentra deja en claro la situación: desde caídas de bobinas de mil kilos de peso y tuberías pesadas cerca de los empleados, hasta la muerte de una trabajadora de 29 años, al ser aplastada por un portón hace seis años atrás. "Nosotros estamos hablando de una fábrica que tiene antecedentes terribles. No es cualquier planta", aclara Pablo Viñas, delegado de los trabajadores, y agrega que "es una planta que en 2006 fue multada por 437 mil pesos por defectos en esta materia que venían siendo reclamados en ministerios del 2002".
Desde hace casi un año, los trabajadores vienen exigiendo al Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires una audiencia para que se realice una inspección en el sitio. "A veces parece que para que te den pelota en un ministerio tiene que pasar una tragedia", comenta el delegado ante la falta de respuestas concretas por parte de las autoridades.
Sin embargo, fue en el incendio del depósito de Iron Mountain, donde murieron 10 bomberos, que uno de los inspectores de la Ciudad de Buenos Aires y los delegados gremiales de los mismos dijeron que "están apretados por el gobierno de la ciudad. Que hay empresas amigas que son intocables", según Pablo Viñas.
Entre idas y vueltas, el gobierno de la ciudad minimizó la situación y recibió a los trabajadores en una audiencia. Finalmente se comprometió a llevar a cabo una inspección, con un plazo de 14 días. Además se va a llamar a la comisión interna para que participe. "¿La novedad cuál es? Los obreros de Clarín en la calle logramos en un día todo lo que esta catarata de funcionarios inútiles no lograron en un año. No cantamos victoria todavía. Esperamos a que se empiecen a resolver los problemas realmente", concluye Viñas dejando en claro que la intención es conseguir condiciones dignas que les permitan a los trabajadores de la planta realizar su trabajo con tranquilidad y seguridad.
Javier Sadir
jsadir@colectivolapalta.com.ar
Insumos cortesía del Foro Argentino de Radios Comunitarias - FARCo