Por un sistema de seguridad público y democrático
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Mirar el pasado reciente para entender el presente y construir el futuro, es la línea que entrecruza la campaña “Reforma Policial Ya”, que promueve Andhes–Abogados y abogadas del noroeste argentino en derechos humanos y estudios sociales. La misma nació como fruto de un largo trabajo sobre seguridad pública, aunque su origen principal está en los hechos ocurridos en diciembre de 2013. En esa ocasión, bajo un 'reclamo por mejoras salariales', la Policía provincial realizó un paro de actividades que desencadenó serios hechos de caos y violencia. También evidenció la ausencia de un marco legal adecuado para el diseño y formulación de programas de seguridad pública.
A siete meses de esos acontecimientos, las heridas sociales comienzan a cicatrizarse pero no quedan en el olvido. Por lo menos así es para Andhes, que busca generar espacios de debate y reflexión para hablar sobre seguridad pública en general y, en especial, sobre una reforma policial.
La campaña se difunde por las redes sociales y para adherirse de forma personal o institucional debe enviarse un e-mail a: seguridad@andhes.org.ar, junto al nombre completo y DNI. La iniciativa se complementa con dos líneas de trabajo. Por un lado, una territorial que consiste en el debate sobre el rol de la policía dentro de los distintos barrios de la provincia. Por otro, promover charlas con referentes en el tema, que brinden elementos para analizar cómo se debe concebir la seguridad pública y la función de la policía dentro de la misma. “Tal como esta conformada la seguridad, el gobierno delega todo en manos de la policía, y es por eso apuntamos a ese lugar”, explicó Ezequiel Azcoeta, coordinador del Equipo de Seguridad y Derechos Humanos de la organización. “Hoy por hoy la reforma policial es la protagonista pero no debería ser la única encargada de la seguridad. Esta sería la punta del iceberg donde se puede comenzar a trabajar”, agregó.
“Creemos que el debate tiene que comenzar en la sociedad, para pensar cómo podemos solucionar el problema y exigir a los sectores políticos.”
Para avanzar a un sistema de seguridad público y democrático, la reforma policial sería solo un estabón que integre todas las medidas. Como afirmó Azcoeta, se debe seguir una serie de acciones que posibilitarán un cambio profundo. Se trata de generar una ley integral de seguridad pública y democrática, la modificación de la ley de contravenciones y la ley orgánica de la policía, y la reforma del código procesal penal. “Este sería el marco que tiene que avanzar para tener políticas claras, transparentes y democráticas en materia de seguridad publica”, sostuvo.
La reforma policial que proponen desde Andhes abarca grandes aspectos, aunque se centra, sobre todo, en organizar una policía democrática que elimine la estructura verticalista con la que hoy funciona. Uno de los puntos a debatir para lograr este objetivo, contó Ezequiel, es el ingreso y formación permanente de los policías, centrando su preparación en una base democrática, donde los derechos humanos sean valores concretos y no una materia. También resulta importante debatir el sistema de estadísticas de la fuerza de seguridad. “Necesitamos estadísticas trasparentes, que se entrecrucen con las del poder judicial para saber qué se tiene que modificar. No se trata de sumar recursos materiales y humanos sino de una investigación que prevea cómo ordenar los recursos”, explicó Azcoeta.
Para avanzar en la discusión, lo fundamental es definir qué es seguridad pública. De este modo se establecería el rol del Estado y se definirían políticas de prevención y no reactivas. Para ello es importante contar con un consenso político amplio, que se genere un manto de legitimidad, de acuerdo social y político. “Esto permitirá avanzar en ejes, lineamientos y políticas de corto, mediano y largo plazo orientadas a encontrar soluciones perdurables sobre la base de la obligación del Estado de dar seguridad a los ciudadanos”, afirmó el miembro de Andhes.
“Creemos que el debate tiene que comenzar en la sociedad, para pensar cómo podemos solucionar el problema y exigir a los sectores políticos” remarcó Azcoeta. La invitación a sumarse a la campaña está abierta a toda la comunidad. No se trata de un cambio superficial sino de un todo sistema de seguridad, donde prevalezca un sentido democrático y de derechos humanos.